Como vimos en "las reglas del 3" en nuestro artículo de Introducción a la Supervivencia y Bushcraft, fabricar un refugio es una de las primeras prioridades en supervivencia para mantener la temperatura corporal, evitar la hipotermia y poder pasar la noche. En este caso también, hay que adaptarse a cada situación, el nivel de urgencia y el material del que disponemos.
Las bases de un refugio 5 estrellas son las siguientes: un espacio reducido o techo bajo (menos espacio que calentar), sin efecto túnel que cree corrientes de aire (una sola entrada), un techo con pendiente (que no haga bolsa y se llene de agua en caso de lluvia) y aislado del suelo. Si consigues todo esto deberías poder pasar la noche sin problema.
Mantener temperatura corporal: manta térmica o bolsa de basura
Como hemos dicho anteriormente, a veces la hipotermia es inminente y no tienes tiempo o recursos para poder construir un refugio de calidad. Aquí, lo más importante es mantener el calor corporal. La primera solución que todo el mundo conoce es la manta térmica de emergencia. Basta con ponerse de cuclillas y envolverse en ella para así evitar que el calor corporal se escape. Si tienes algunas nociones de nudos y refugio con tarp, incluso puedes construir un refugio improvisado con la manta térmica, un bastón de trekking y unos vientos.
Otra opción muy eficaz y no tan conocida es usar una bolsa de basura de tamaño industrial. Yo siempre llevo una en mi riñonera y todo bushcrafter que se aprecie conoce esa técnica de aislamiento. Un bolsa de basura de 100L y resistente puede servir de aislante del suelo, de techo, o incluso de refugio completo. Basta con colocarla sobre tu cabeza y hacer un corte de 25 cm en uno de los laterales, lo justo para poder sacar la cara (no la cabeza entera, ni los brazos).
Te colocas de cuclillas, de forma que la bolsa llegue al suelo y todo tu cuerpo que en el interior de esta. Incluso puedes encender una vela y colocarla entre tus pies, y verás lo rápido que sube la temperatura en el interior de la bolsa.
En caso de que dispongas de más tiempo para poder construir un refugio, puede que llevemos encima un tarp de bushcraft y/o una hamaca, o puede que no tengamos nada y nos toque hacerlo con medios naturales. Veremos las dos casuísticas.
Refugio con tarp de bushcraft
El tarp 3x3 es un producto muy común en bushcraft (algunos más ligeros que otros según el tipo de escapada y el país o temperatura) para construir un refugio, un toldo sobre la hamaca, una tienda, un paraviento... según la necesidad. Tienen una infinidad de posibilidades de configuración, no tienen varillas ni estructura y los más ligeros no llegan ni a 800 g de peso, por lo que son muy compactos y ligeros de llevar en la mochila.
Pros de un tarp vs. una tienda
- Ligero y compacto
- Más barato que una tienda
- El diseño "abierto" te hace sentir más cerca de la naturaleza
- Permite que fluya aire nuevo y reduzca la condensación
- Algunas configuraciones permiten cocinar o hacer fuego mientras sigues protegido
- Personalizables con muchos tamaños, formas y configuraciones para plantar un tarp
Contras de un tarp vs. una tienda
- No tienes protección contra insectos
- Expuesto a lluvia o viento si no se planta correctamente
- Menos estable que una tienda de campaña de tamaño similar
- Puede ser tedioso y largo de montar correctamente
Recordando las claves de un buen refugio de nuestra introducción, lo ideal es una configuración de tarp en situación de supervivencia es que tenga techo bajo, con una sola entrada, un techo con pendiente que no haga bolsa y poder dormir aislado del suelo. Para sujetar la parte superior del techo, puedes usar un bastón de trekking o una rama, o bien atar una cuerda bien tensada entre dos árboles (yo suelo llevar un trozo de 7 m de paracord y otros dos trozos de 3,5 m) y usar esa guía para sujetar tu tarp. Si quieres aislarte del suelo para no dormir directamente sobre él, puedes usar 1/4 o 1/3 del tarp como suelo, doblándolo por debajo de tu configuración. En cuanto a la base, de las paredes, basta con clavarlas directamente el suelo mediante piquetas o vientos, y en el caso de que te quedes sin puedes hacer piquetas con ramas cuya punta afilas con el cuchillo.
Con estas 4 nociones, practicando un poco y aprendiendo a hacer unos pocos nudos básicos (tensor, alondra, nudo de escape rápido, nudo plano, prusik, ballestrinque) podrás llegar a hacer muchísimas configuraciones de refugio con tarp:
Refugio natural con ramas y hojas
En caso de supervivencia real, lo más seguro es que no dispongas ni de bolsa de basura, ni de manta de emergencia ni mucho menos de una tienda o tarp. En ese caso, no quedará más opción que hacer un refugio natural.
Para ello, necesitarás primero una estructura sólida sobre la que apoyarás varias ramas para llenar al máximo las paredes. Puedes hacer varias formas distintas, con un travesaño horizontal y dos aguas, una sola agua, travesaño inclinado estilo trípode (como en la foto)... o incluso aprovechar un árbol inclinado o roto como base sobre la que apoyar las ramas.
Foto de Tom Howe Bushcraft
Una vez tengas el travesaño y las paredes acabados, tocará poner una última capa de ramas y hojas para impermeabilizar y aislar al máximo. Las agujas de pino y el musgo son una muy buena opción en estos casos, y que son muy densos y aislan muy bien. Finalmente, si puedes apañar una cama elevada o al menos aislarte del suelo con unas cuantas hojas secas más, ya tendrás un refugio muy decente.
Lo ideal para poner la guinda sobre el pastel sería hacer un fuego delante, pero eso lo veremos en la quinta C: Combustión.
Siguiente entrega: Bushcraft 3/5 - Contenedor. Recolección y Potabilización de Agua.